sábado, 21 de noviembre de 2009

Coloquio de cierre: Evaluación y autoevaluación


A partir de una guía de autoevaluación que habíamos conversado con antelación, el lunes 16 desarrollamos el coloquio de cierre del Espacio de la Práctica IV.
La guía tenía por objeto que cada uno de los alumnos practicantes pudiera reflexionar acerca de qué aprendió durante el período de práctica, para qué le sirvió, qué aspectos rescató como positivos y en cuáles necesita mejorar, en relación con los siguientes aspectos:

En cuanto a la planificación de las clases, de sus contenidos, en cuanto a las fuentes a las que debió recurrir para acercarse a esos contenidos, a la recuperación de conocimientos que sus alumnos ya poseen, a los ajustes necesarios para atender a las características de todos los alumnos, etc.
En cuanto al desarrollo de las clases, al tiempo programado para el desarrollo de los contenidos planificados, a las posibilidades de las actividades diseñadas y de los textos seleccionados como recursos, a la claridad de las consignas de trabajo, a las estrategias pensadas para el acercamiento a los contenidos (uso del pizarrón, exposición, confección de cuadros, lectura, etc.), al acompañamiento que realizó mientras los alumnos trabajaban, al incentivo de la producción escrita (ficcional o no), etc.
En cuanto a la evaluación, al empleo de diversas estrategias evaluativas (exámenes escritos, trabajos prácticos, producciones, evaluaciones orales, etc.), a la elaboración de registros que permitan seguir el avance de los alumnos, a la periodicidad y al momento de la evaluación, etc.
En cuanto al clima de la clase, al cumplimiento de los acuerdos de convivencia, a la preocupación por conocer los intereses, gustos y necesidades de los alumnos, al incentivo para que los alumnos trabajen y participen en todas las actividades, etc.

Fueron muy interesantes los testimonios de los alumnos respecto de lo que la experiencia de la práctica significó para ellos. Hablaron de que pudieron pensar en la necesidad de planificar en contexto, es decir, para un grupo de alumnos determinado, con expectativas y necesidades determinadas, en un momento del desarrollo del ciclo lectivo en particular, etc; en la importancia de encontrar estrategias diversas para asegurar el vínculo entre los alumnos y el conocimiento; en las exigencias de evaluación “permanente” que suelen marcar los docentes (como una manera de malinterpretar la tan mentada “evaluación en proceso”); en la responsabilidad y la autoexigencia que, como docentes, deben plantearse al momento de pararse frente a un curso.
Todos, sin duda, manifestaron que la práctica es un momento necesario para su formación como docentes pero que, indudablemente también, no es suficiente: a ser docente, se aprende siendo docente, por lo que, entonces, el camino de su formación está por empezar.

Esperamos todos los comentarios sobre su práctica que ellos quieran hacer, ahora, a través de este medio.


martes, 10 de noviembre de 2009

La educación es cosa seria!!!!

Algunos chistes dan mucha risa... si no fuera porque dan ganas de ponerse a llorar!!!!! (Click sobre la viñeta para ampliar)